El preparador Shelby American acaba de presentar su última maravilla. Un paquete de personalización con el que transforma el Ford Mustang GT en el Shelby Súper Snake con 800 CV de potencia, el más rápido de la historia.

La elección del Ford Mustang GT se basa en su motor Coyote, un V8 de 5.0 litros que ofrece una potencia del 450 CV, al que  Shelby American le realiza las mejoras necesarias, como la incorporación de diferentes turbos para llegar a una potencia de 710 CV en su paquete estándar. Pero si tal fuerza no resulta satisfactoria, el preparador ofrece un paquete superior con el que se pueden alcanzar los 0 a 100 Km/h en tan solo 3,5 segundos, gracias a una potencia estratosférica de 800 CV, casi el doble de la que trae el muscle car original.

 

Tanta potencia tiene que ir acompañada de  algunos ajustes adicionales tanto a nivel mecánico, como estético y aerodinámico. Para ello se ha sustituido el radiador, se han puesto nuevas pinzas de frenos Brembo, con seis pistones para el eje delantero y cuatro para el trasero. Lleva una suspensión más deportiva. Se ha añadido un labio frontal, el paragolpes es completamente nuevo, el capó cuenta con dos entradas de aire, pasos de rueda ensanchados, faldones laterales, un alerón trasero en forma de “cola de pato” que permitirá mejorar la aerodinámica, al igual que su nuevo difusor trasero. Llantas de aleación forjada de 20 pulgadas (a elegir entre acabado negro o metal brillante), y los vinilos que lo recorren  a lo largo. En el interior destacan los típicos emblemas del preparador entre otros elementos.

Shelby American ofrece a sus clientes la posibilidad de ensanchar aún más la carrocería del Shelby Super Snake, y ofrece además una suspensión aún más avanzada de una sola pieza.